Opinión: La formación del periodista

Cotidianamente he escuchado la concepción que las personas tienen acerca de un periodista. Lo conciben como “sabio” por saber todo acerca de cualquier tema o acontecimiento o por lo menos contar con la obligación de saberlo. Pero hay algo que yo juzgo en esta definición; pongo entre signos de interrogación lo de “sabio” porque aún así hay por lo menos un dato que hasta Manuel Buendía reconoce no saberlo y es que realmente nunca sabemos todo pues nunca dejamos de aprender.
Los días pasados observaba un programa de televisión transmitido por las noches en el canal dos que se llama “Todo mundo cree que sabe” y me llamó la atención por tener en su contenido preguntas de conocimiento académico; me emocioné porque quise contestarlas pero me di cuneta de algo que me dejó mal sabor de boca: eran unas preguntas tan básicas y tan vanales que me sacó de órbita y dije: ¡Cómo es posible! Pero quiero aclarar que aún así no me sorprendió, estamos hablando de televisión abierta mexicana y... Qué se puede esperar ¿cierto? Analizando el programa la jugadora de esa noche que por cierto perdió el concurso contra un grupo de niños de primaria termina diciendo “Me llamo fulana de tal, estudié ingeniería industrial y un niño de primaria sabe más que yo”…. Hey! ¿Un niño de primaria sabe más que yo? Por un momento lo creí porque enserio que hay universitarios que deberían regresarse a la primaria, pero por otro lado dije, hay que considerar que el nivel de competencia no es el mismo, pudiera ser que los niños tuvieran más conocimientos que la egresada profesional pero también ella sabe cosas que los niños de primaria no conocen. Entonces tuve mi opinión final: más bien el conocimiento es algo gradual, es un proceso porque como dije antes nunca se deja de aprender y aún más que eso la sabiduría a final de cuentas es retroalimentaria. Por eso se dice que la formación de un periodista es interminable porque siempre hay que estar actualizados y si la vamos hacer de críticos entonces conocer de todo es el pan de cada día.
Por otro lado me dan risa la cantidad de publicaciones que crecen como hongos bajo la lluvia según Buendía; la improvisación de una sección, una franquicia, etc. que nacen por el apuro de querer ser periodistas como el periódico titulado “el periódico, las cosas por su nombre” que a criterio propio la verdad dudo mucho de su contenido, es más ni siquiera mi aceptación personal tiene.
Una parte importante de la formación de los periodistas y donde considero que está el núcleo de todo esto son el autodidactismo y la enseñanza académica porque la parte profesional nos la da la escuela, pero no es suficiente. Tenemos que buscar nuestros propios medios, nuestras propias fuentes. Tenemos que viajar, conocer nuevas culturas y darnos cuenta del enorme entorno que nos envuelve para construir una formación sólida y sobre todo una actitud crítica de las cosas. Pero esto es algo que se logra con nuestros propios esfuerzos, con nuestras propias uñas, por nuestros propios caminos; y lo más importante de todo es no conformarnos con la primera información que se nos da, sino hay que buscar otras respuestas, dudar de lo que se dice, porque la duda induce a una investigación y eso es lo mejor de todo.